
No había motivo para seguir a las masas, no hay razón para caminar por senderos ya trazados.
Se nos sugiere dormir demasiado, se nos incita a mantenernos en calma. No hay nada como mantenerse en movimiento, en horizontes cambiantes, no hay nada de malo en seguir a la luna y disfrutar cada una de sus fases.
Yo he perdido la cabeza y me siento tan orgulloso de ello.
Infielmente tuyo,
Javier