Me equivoqué, eran 3 preguntas las que quería hacer:
¿Te casaste?
- Si – respondió ellla
¿Estás embarazada?
- No, pero si hay planes de familia – Respondió
Me faltó preguntar lo siguiente:
¿Me sigues leyendo?
Sonó mi teléfono a las 08:52 de la mañana, un número que no tenía registrado, pero una voz que se me hacia familiar. Curiosamente no había dormido la noche anterior, tantas cosas daban vuelta en mi cabeza, quizás necesitaba lo exquisito del insomnio para asimilar tantas cosas.
¿Será esta una oportunidad para realmente dar vuelta esta página para cerrar un libro delicioso?
Quizás solo una voz que me parece familiar para seguir sanando.
No quería que esa conversación acabara nunca, no había escuchado tanta verdad en tanto tiempo, llevaba tanto tiempo anestesiado, tanto tiempo en tonalidades extrañas, que escuchar tu voz fue sumergirse de nuevo entre las olas, donde mejor me siento.
Siempre me pensé frente al altar, siempre me pensé en el caos, hoy anhelo todo lo contrario, anhelo tu felicidad con la persona que has elegido, que por lo que me dices es un buen hombre, no hay manera de que pueda desconfiar de tu criterio.
Solo me gustaría que pensaras en mi como alguien que siempre estará ahí, deseando lo mejor, un observador, feliz de todos tus grandes exitos.
Nadie se me adelantó, solo que yo realmente te amo en libertad, A pesar de tus egoísmos y que estoy dispuesto a soltar. NO DEJAR DE AMAR
Infielmente tuyo,
Javier
Se sentía tan bien experimentar tal nivel de complicidad.
Como se lo dije a mi hermana, soy la persona indicada para llamar cuando asesines a alguien y debamos deshacernos del cadáver