No había escuchado su voz desde hacía ya un par de años. Me sentí tan solo hoy que le pedí que me escuchara.
Me sentí tan en la mierda que tuve que usar el recurso que tenía prohibido, pedirle un poco de amistad.
Nadie podría entender cómo ella será siempre un cable a tierra para mi, nadie comprenderá jamás que no soy bueno entendiendo razones. Será siempre ese impulso el que dictaminará el camino.
Hay muchas cosas que no necesito preguntar, pero todo me importa cuando se trata de ustedes.
Doblaste a la izquierda verdad ? No te espantes cariño, que no estoy observando desde la ventana.
Javier